Hay un
refrán que dice: “hijo de gato, caza ratón”. Con esto les quiero decir que
cuando los hijos nos ven hacer cosas, nos quieren imitar. Un ejemplo de esto es
que la Chiqui me ha visto escribiendo y ella también se ha interesado en
escribir. La diferencia es que yo no soy escritor, sino más bien un narrador de
los eventos de mis hijos. Ella en cambio, sí es una escritora porque todo lo que
escribe es producto de su imaginación, y eso no es fácil.
Otra cosa
que ha empezado a imitar es hacer obras de caridad, ya que su madre se
involucra en muchos proyectos de esta índole (shhhh, que mi esposa no se entere
porque no le gusta que nadie sepa que lo hace). Un ejemplo de esto sucedió el
pasado 21 de julio de 2012 en el Hospital de Niños San Jorge.
Allí nos
dimos cita por invitación de una
organización sin fines de lucro llamada Un
rayito de sol en tu habitación para entregar una mochila, que en su interior tuviese
artículos escolares, a los pacientes del piso de oncología. Mi esposa y una
compañera de trabajo prepararon una y
fuimos a entregarla.
Nos
acomodamos junto a la mesa y cuando venían los niños les entregábamos la que
más les gustara.
De repente,
llega este angelito en brazos de su padre. Una niña de algunos cuatro años, con
los ojos más hermosos que he visto y con una mirada tierna. Buscaba entre las
mochilas y al fin encontró la que le gustaba.
En ese instante
noté que mi hija buscaba algo en su cartera. De ella sacó unos papeles y se
dirigió al padre de la niña:
─Permiso, ¿le
puedo regalar un cuento a su hija?, preguntó.
─Claro, dijo
él.
Es aquí que
se me formó un nudo en la garganta y me emocioné muchísimo. La Chiqui se
desprendió de uno de sus cuentos para regalárselo a aquella pequeña.
©2012-Carlos Torres
─Dile a
papá que te lo lea cuando te sientas un poquito mal para que te alegre.
─Así lo
haré, no te preocupes.
Uff, que
fuerte la preguntita. Demasiado profunda para una niña de su edad.
¿Qué aprendí de esto?
Lo que sembramos es lo que cosechamos. Sigamos siendo buen ejemplo para nuestros hijos y de seguro las cosas mejorarán.
Tu niña es una genio. La admiro muchísimo! Y de grandiosos padres, grandiosos hijos. Saludos!
ResponderEliminarGracias Andreina !
ResponderEliminarEstá muy bien enseñar a nuestros niños a hacer el bien, pero hay que tener cuidado.
ResponderEliminar"A diferencia de la solidaridad, que es horizontal y se ejerce de igual a igual, la caridad se practica de arriba-abajo, humilla a quien la recibe y jamás altera ni un poquito las relaciones de poder." - Eduardo Galeano.
Sniff! Me hiciste llorar. Esa chiquitina es super especial pero mas especial son sus padres. Tan bella!!!!
ResponderEliminarSe me salieron las lágrimas!!!!
ResponderEliminarWow que linda historia.Necesitamos sensibilizar más a nuestros chiquitos...solo así llegaran a ser mejores adultos en el futuro.
ResponderEliminarHermosa historia. Que detalle más hermoso el de tu hija.
ResponderEliminarEste tipo de historias son las que te agarran el corazón y se te cuelgan del alma. Bravo para la Chiqui!!!
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